Además de la ropa y calzado adecuado, hay que comer caliente todo lo que podamos. Beber mucho caldo y sopas, y leche caliente con chocolate. Ésta última idea la cogí de Eric Tabarly, mítico navegante Francés, siempre tomaba buenas tazas de chocolate caliente a bordo. ¡Y qué bien sientan!
A bordo del Pottoka, además, tenemos calefacción. Si tienes la suerte de tenerla, es importante arrancarla unas horas antes de ir a dormir ya que hace que el barco se mantenga seco y calentito. Esto hace que cualquier marinero/a se recupere mientras repasa mentalmente la jornada.
Si te animas, en el puente de Diciembre te enseñaré a gestionar todo esto para poder disfrutar de unas jornadas de navegación inolvidables. ¿Te vienes?
Mándame mensaje a través del formulario de contacto y ten la mejor experiencia en pleno invierno.
Os esperamos a bordo.